LO BUENO: El cirujano plástico Abdul Ghafar Ghayur, ha sido comparado con una versión moderna de Robin Hood. Realiza cirugías que cambian la vida a pacientes de bajos recursos en Afganistán con los ingresos que obtiene de la cirugía plástica y los procedimientos cosméticos que realiza a sus pacientes ricos. Sus pacientes Afganos suelen acudir a él pidiendo una cirugía reconstructiva para tratar una malformación congénita o heridas postraumáticas. «Si un paciente viene y dice ‘Sólo puedo pagar $ 100,’ yo puedo hacerlo por $ 100. o $ 20, o $ 30», dijo el Dr. Ghayur. «Porque si decidimos esperar hasta que el paciente tenga el dinero, el paciente no tendría ninguna posibilidad de sobrevivir.» [1] El Dr. Ghayur dijo a Medscape recientemente que le gustaría iniciar un centro de quemados en Kabul para las víctimas de la guerra y mujeres que han sufrido ataques con ácido.
LO MALO: En julio, el medico oncólogo Farid Fata, fue condenado a 45 años de prisión en Detroit por la administración de quimioterapia excesiva o innecesaria a 543 pacientes. Algunos de ellos deliberadamente mal diagnosticados con cáncer. Además de soportar la quimioterapia innecesaria, los pacientes sufrieron angustia ante la posibilidad de la muerte. El fraude al sistema “Medicare” y a los seguros privados le dejó utilidades de por lo menos $ 17 millones de dólares. Un testigo dijo que el oncólogo trató con quimioterapias innecesarias a su padre hasta el punto de matarlo. El Departamento de Justicia de Estados Unidos había pedido una condena de 175 años. [2]